¿Cómo Puede La Luz Ayudar A Niños Autistas?


La luz puede tener una influencia profunda en las personas. Diferentes colores de luz pueden afectar nuestro ánimo, y la falta de luz natural puede causar depresión. Esto tiene una gran influencia en personas con autismo.

Los chicos con autismo son especialmente susceptibles a cambios de humor debido a la iluminación. Las luces con colores tranquilos, como el azul, pueden ayudar a tranquilizar al niño y estimular su creatividad. Las luces intermitentes con fuertes colores, por otro lado, pueden confundir e inclusive dañarlos. Por esta razón, es importante que la iluminación sea controlada y monitoreada en las habitaciones de los pequeños.

Además de la iluminación artificial, la luz natural tiene también sus efectos. Se ha probado que ella puede ayudar a regular los ritmos circadianos. Estos ritmos gobiernan nuestro reloj interno. Por ejemplo, ellos nos dicen cuándo es la hora de ir a dormir. La falta de luz natural puede causar que estos ritmos se desintonicen. Por consiguiente, un tratamiento puede lograr que un chico con insomnio pueda dormir sin ayuda y esté más alerta durante el día, entre otros beneficios.

Para fines terapéuticos, las luces que brillan a 10,000 lux y no emiten luces ultravioletas son óptimas. El mejor momento para los tratamientos es durante la mañana, tan pronto cuando el niño se levanta. Con sólo pasar 30 minutos en la luz se puede mejorar su ánimo y hábitos de dormir. Puede ser que 30 minutos no sean posibles en el comienzo, sin embargo, y mientras se progresa con el tratamiento, puede ser útil realizar otra sesión a la tarde. Pero la terapia a la noche puede tener efectos negativos, empeorando la rutina del niño y haciendo aún más difícil que pueda dormirse.

Las luces diseñadas para la terapia necesitan asegurar que sus especificaciones sean adecuadas para no dañar al pequeño. El LS-160 y el CS-160 de Konica Minolta Sensing tiene amplios rangos de medición, para que usted este seguro que sus lamparitas emiten la cantidad correcta de luz. Además, el CS-160 tiene especificaciones para medir el color, por lo que usted puede asegurarse que un color específico de luz no va a agitar a su niño. Asegúrese que sus luces terapéuticas están listas de usar con Konica Minolta Sensing.

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